REFLEXIÓN CRÍTICA. Las últimas patadas de ahogado de Jorge Gamboa

Pedro Martínez Bello

Pedro Martínez Bello

Por Pedro Martínez Bello
Cuernavaca, Morelos; 21 de abril de 2025. El magistrado Jorge Gamboa Olea, arrogante e inflado como él mismo, no se ha dado cuenta que ya no es el presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) y que el Poder Judicial sigue sin cabeza porque el magistrado Juan Gabriel Vargas Téllez tampoco preside dicha institución.
La lucha por el control del Consejo de Administración inició, y desde la Cámara de diputados el coordinador parlamentario del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), Rafael Reyes Reyes, pretende imponer a un incondicional como lo es Miguel Lucia Espejo.
En sus últimas patadas de ahogado, Jorge Gamboa Olea quiere dejar el control del órgano interno del Poder Judicial a una persona cercana, que le permita continuar con el manejo del presupuesto del TSJ y, ante todo, del Fondo Auxiliar.
Más que servir, la reforma al Poder Judicial aprobada por la Quincuagésima Sexta Legislatura local será un motivo más de pugna entre legisladores y también entre magistrados. De nueva cuenta, el control por el poder y el dinero desplazara a la administración de justicia.
En su embelesamiento por el poder y el dinero, Jorge Gamboa Olea no dejará la magistratura sin seguir con un incondicional al frente del Consejo de Administración, porque al quedar fuera del presupuesto durante un año no podrá litigar como abogado, al menos en el Estado de Morelos.
Perder su poderío es un Knock out al ego y arrogancia del juez de segunda instancia, ya desconocido por los Poderes Judicial y Legislativo, al igual que su adversario Juan Gabriel Vargas Téllez, que aún siguen sin darse cuenta de algo: son un número más en las salas del TSJ.
La pelea por la titularidad del Consejo de Administración también traerá consecuencias dentro del Congreso: aviva una división severa entre los grupos parlamentarios de MORENA y del Partido Acción Nacional (PAN), porque su coordinador parlamentario y presidente de la Junta Política y de Gobierno, Daniel Martínez Terrazas, pretende un espacio para un compañero de su instituto político, el exmagistrado Carlos Iván Arenas Melgar.
Mientras tanto, la administración de la justicia queda relegada para otros años, porque se prevé un sexenio más de simulación en los Poderes Judicial y Legislativo, que será en perjuicio del pueblo de Morelos y de quienes reclamen sus derechos en ese rubro.