Decreto para buscar la verdad, da nueva esperanza a padres de los 43
Yesenia Daniel
Xoxocotla, Morelos; 5 de enero de 2019. En cuatro años 3 mamás y papás han muerto sin conocer lo que les pasó realmente a sus hijos la noche del 26 de septiembre en Iguala, Guerrero; y sobretodo sin saber dónde están, «no queremos que pase más tiempo porque muchos se han quedado en el camino sin saber qué pasó», comenta Meliton Ortega Carlos, tío de Mauricio Ortega Valerio, estudiante desaparecido de la Normal Rural «Raúl Isidro Burgos» de Ayotzinapa.
La caravana de los padres de los 43 muchachos estuvo en Xoxocotla -nuevo pueblo indígena en Morelos-, en donde colgaron las fotos de los estudiantes en una estructura metálica que nombraron como «el árbol de la memoria», para no olvidar que las familias y el pueblo mexicano sigue exigiendo una respuesta real de lo que pasó en Iguala la noche del 26 de septiembre de donde desaparecieron los 43 estudiantes y donde hubo víctimas mortales enmedio de una dudosa versión de un ataque armado.
El 3 de enero, dos días después de la toma de protesta del nuevo presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció y firmó el decreto para conocer la verdad en el caso Ayotzinapa. El objetivo, de acuerdo a la Presidencia de la república, es darles a los padres de los estudiantes una respuesta real de dónde están sus hijos. El caso Ayotzinapa ocurrido hace ya más de 4 años ha sido calificado como desaparición forzada y como un crimen de lesa humanidad.
«Los padres de familia estuvimos atestiguando ese decreto (…) ahí se hace realidad ese compromiso de parte del gobierno. Nos parece interesante que haya esa voluntad política, que puedan avanzar todas esas líneas de investigación que quedaron pendientes en la anterior administración; para nosotros los padres, escuchar el mensaje de parte del señor Presidente nos da esa fortaleza, esa esperanza de saber qué pasó con los muchachos; no nos interesa ver montones de personas en las cárceles pero si castigar a quienes tuvieron responsabilidad o escondieron pruebas», comentó Meliton Ortega, representante también, de esta caravana.
El centro cultural Yankuik Kuikamatilistli en Xoxocotla, habló sobre el acompañamiento a los padres y la importancia de que el movimiento no desaparezca puesto que la solidaridad de parte de la sociedad es cada vez menos, no obstante a que en esta ocasión la presencia de ciudadanos fue pequeña, sí hubo apoyo de parte de comerciantes para la organización y solidaridad incluso de una Iglesia cristiana que ofrecieron una oración por la causa.
«Nosotros no pedimos más que saber qué pasó con los estudiantes (…) lo que sí hemos entendido es que hay una colusión entre el gobierno y los grupos delincuencia organizada, la administración de Enrique Peña Nieto, quiso miminizar el tema y hacerlo muy local pero esto no fue así. Era el sueño de estos 43 tener un futuro y ese sueño se cortó, se quedó en el aire».