Limpian “podredumbre” de la LIII legislatura, la más corrupta en la historia de Morelos
Por Máximo Cerdio
Cuernavaca, Morelos; 31 de agosto de 2018. Integrantes de la Asociación Cívica Gustavo Alejandro Salgado Delgado, y José Casas, diputado electo, se presentaron temprano en la nueva sede del recinto legislativo, a medio terminar; llevaban cubetas con jabón, estropajos, cepillos, hierbas, incensario y demás accesorios.
Después de una hora, entraron a la explanada del Congreso a pesar de la negativa de la diputada Hortencia Figueroa Peralta. José Casas, le dijo a ésta el día de ayer, que comenzaría a sacar toda la “basura” y la “mugre” de ese lugar para que cuando tomaran posesión estuviera limpia; el legislador electo hizo énfasis en esas palabras “mugre” y “basura”, refiriéndose los diputados de la LIII que, de acuerdo con muchos actores políticos, ha sido la peor (la más ratera, sin vergüenza, cínica, la más corrupta, según el legislador Jesús Escamilla Casarrubias) en la historia de Morelos. Hortencia, quien perdió la senaduría con la diputada Lucía Meza Guzmán, le dijo que no podía hacer eso, hasta el dos de septiembre.
Pasándose por el “Arco del Triunfo”, las órdenes de Hortencia Figueroa, el legislador y los ciudadanos limpiaron con jabón las escalinatas del Congreso, después de casi seis años de que los antiguos diputados tomaron protesta del cargo y la gran mayoría se convirtiera en “gatos” del gobernador Graco Ramírez, a decir del diputado de Partido Humanista Chucho Escamilla.
También quemaron incienso y ramearon a Pepe Casas y a otro legislador, para quitarle las malas vibras, al entrar en ese “mortal centro de corrupción”, como llamaron al edifico.
En este acto estuvieron presentes el “Graco Mierda” una escultura de migajón con la máscara de Graco Ramírez, que los integrantes de la asociación usan con frecuencia para protestar en las calles.
Los festejos por la salida de los “diputados más ladrones de Morelos” concluyó con el Himno Nacional mexicano y con un atole y unos tamales que fueron llevados para celebrar la ocasión.
Una de las últimas «canalladas» (como le llamó Jesús Escamilla) de Hortencia Figueroa fue convocar a sesión extraordinaria el 29 de agosto, para designar, en lo oscuro, a Flor Dessiré como directora del Instituto de la Mujer para el Estado de Morelos para un periodo de tres años y hacer otros nombramientos más. Figueroa Peralta “ordenó que no se permitiera el acceso a los medios de comunicación a la sesión del periodo extraordinario, que se tuvo que realizar en un salón alterno al de plenos, debido a la falta de suministro de energía eléctrica. Trascendió que incluso había ordenado el retiro de celulares a empleados que se encontraban en el lugar. En esta sesión, hicieron vacío los diputados del PRI y del PAN”.