Superman ¿por qué no llegaste antes?
Superman ¿por qué no llegaste antes?: niña en Jojutla
Yesenia Daniel
Jojutla, Morelos, 30 de septiembre de 2017. En el albergue de la unidad deportiva “Niños Héroes” del municipio de Jojutla, una pequeñita de aproximadamente 4 años de edad con una diadema rosa, recrimina a un muchacho disfrazado de súper héroe el por qué no llegó antes, pues su casa y la de sus vecinos se vino abajo en el sismo del 7.1 del pasado 19 de septiembre. Ahora, ella junto con su familia y sus pocas pertenencias, pasa los días en un albergue en donde se recupera del asombro de ver su entorno hecho pedazos.
“Superman ¿por qué no llegaste antes?”, le dijo la pequeña un tanto molesta a Eduardo Díaz, quien le ofreció una bolsita de dulces, ella levantó los hombros y se dejó abrazar por el superhéroe.
Han pasado once días desde que la tierra se sacudió, el sismo de 7.1 tuvo su epicentro en Morelos, específicamente en el municipio de Axochiapan, ubicado a 2 horas del municipio de Jojutla, pero quien sabe por qué en Jojutla tuvo repercusiones inimaginables para su gente; 2 mil viviendas entre casas, edificios públicos y negocios fueron severamente afectados, 17 personas entre niños y adultos murieron entre los escombros o como consecuencia de esta sacudida. Todos los días se viven momentos asombrosos, conmovedores, tristes y esperanzadores.
Entre risas y juegos este grupo de amigos camina por la avenida Instituto Tecnológico e Industrial, cerca de la glorieta de la cabeza de Juárez en el municipio de Jojutla, son las 5 de la tarde, uno carga una bocina que trajo de su casa, dos van disfrazados con las botargas del personaje del dinosaurio Barney, otro de la cerdita Peppa; el calor que sigue siendo intenso en Jojutla, obliga a los muchachos a quitarse la parte superior de los disfraces, sus rostros se asoman, sonrientes; los demás los ayudan a caminar sin perder el equilibrio o cargan cosas para regalar a los niños, su misión este sábado fue divertir a los pequeños en los albergues de Jojutla en donde la niñez pasa sus días sin poder ir a clases porque al menos 8 primarias será demolidas y otras muchas tienen afectaciones graves, la mayoría si no es que todas, están esperando el dictamen de las autoridades educativas para regresar a clases. Jojutla, fue el municipio más afectado por el movimiento telúrico del pasado 19 de septiembre, la desgracia se nota en sus calles.
Oliver Díaz, Dante García, Kavit Garcìa, Alex García y Kevin se reunieron el 20 de septiembre en las letras del zócalo de Jojutla, no tenían dinero, pero planearon cómo ayudar en esos momentos cuando había casas destrozadas y los ánimos rotos.
Ellos son estudiantes y pertenecen a la generación que ha sido criticada su falta de conciencia social y por llevar una vida de comodidades.
En la entrada de la Unidad Deportiva “Niños Héroes” de Jojutla, el grupo de amigos se encuentra con otros muchachos de Cuernavaca, son Elvia Magdaleno, Josafat Ballastra y Eduardo Díaz, disfrazados de superhéroes, sin nada planeado más que venir con la convicción de regalar abrazos y dar sonrisas.
Ambos grupos se juntan y entran a la unidad en donde los damnificados sobreviven con lo que pudieron sacar de sus casas, con muy pocas cosas, y algunos niños muy afortunados con lápices de colores, cuadernos y libros de actividades, otras con una pelota organizan retas de fút y un perro blanco como de peluche trata de arrebatar el balón con ladridos a los niños, en su alrededor hay casitas de campamento color azul con signos orientales que aún no han sido asignadas a los damnificados.
Los muchachos avanzan conforme se lo permiten los niños que en cuanto los ven llegar corren a abrazarlos, miran la capa de Superman de Eduardo y dicen: “Superman es súper alto”, y sus miradas llegan hasta las nubes, también le dicen: ¿Cómo le haces para estar tan grandote Superman?, Ni son de verdad esos músculos, ¿por qué no trajiste a la mujer maravilla?, ¿Puedes volar?, Yo vi tu película, Batman es malo verdad?».
Señoras y muchachas se acercan también para tomarse la foto con él, bromean sobre sí agarrarlo al tomarse la foto o no.
Oliver Díaz llega a la cancha de fútbol, pone la bocina y otro de los amigos vincula las canciones que han de sonar de su teléfono en la bocina: “tranquilos, tranquilos, no tenemos mucho dinero para traer el súper equipo pero hacemos esto con mucho cariño”, dice a los niños que están impacientes por bailar y jugar.
El primer día el sismo dejó a los muchachos impactados, como a la mayoría de la gente en Jojutla y los municipios vecinos, pero al día siguiente, el miércoles se reunieron en el zócalo y decidieron ir a retirar escombros, en los días siguientes juntaron agua de sus casas para ir a repartir a las calles, a los voluntarios, brigadistas y la gente que se quedó sin casa, “luego estar sacando escombros todos estos días pues nuestro cuerpo ya no nos respondía y decidimos venir a los albergues, él trajo la bocina, cooperamos para rentar las botargas y comprar dulces y aquí estamos”, comentó Oliver.